Tengo unas manos frías como la noche
Esperando la calidez de una piel
Que acariciar.
Tengo una corazón que dejo de latir
Con cada indiferencia tuya.
Unas palabras escritas en el aire,
Tengo un alma que se quedo vacía
Con cada desprecio tuyo,
Tengo una voz apagada en el filo
De mi garganta, esperando salir
De tu silencio.
Tengo un sueño convertido en pesadilla
Tengo mis cuchillas afiladas
Tengo una vida ya sin vida…
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